Cómo dialogar con tu hijo

“¡Madre mía! ¡Qué mal le está sentando la adolescencia a mi hijo!” ¿Cuántas veces hemos dicho o escuchado esta expresión?

Y, aún más importante, ¿Cuántas veces nos hemos preguntado cuándo recuperaremos a nuestro hijo/a?

Como si la adolescencia se tratase de un pequeño trago que hay que pasar y del que sólo quedarán algunas anécdotas que contar. Por supuesto, una etapa que conocemos y dominamos porque para eso la hemos vivido nosotros. Sin llegar a cuestionarnos si el haber pasado por ahí nos hace saber qué siente o piensa nuestro adolescente en cada momento.

Por fortuna, la respuesta a esta última pregunta es sencilla: NUNCA vas a recuperar a tu hijo/a, sin ser esto necesariamente malo, todo lo contrario. Durante la adolescencia, el cerebro de nuestros niños/as cambia y avanza en su desarrollo, sus conexiones y hasta la cantidad de actividad neurológica varía.

  • Modifican su manera de pensar y razonar.
  • Interpretan el mundo de forma diferente
  • Toman decisiones en función de otros criterios, en muchas ocasiones, impulsivamente y llevados por las emociones y afectos.

No podemos negarte que se trata de una etapa compleja, a la par que bonita y con un potencial brutal. Si le dedicas tiempo, podrás darte cuenta de que las conversaciones son más profundas, que sus ideas son más creativas, que su sentido de justicia se acentúa y que la crítica hacia un mundo (antes percibido como ideal) los mueve y motiva a alcanzar conocimientos más elaborados y a la búsqueda de soluciones. Lo que nos conduce a la siguiente gran pregunta, ¿Cómo llegar a tener esas conversaciones, si mi hijo/a siempre está con el móvil o en esa cueva que llama habitación?

Desde Neuropsipe te proporcionamos cinco estrategias básicas para facilitarte la comunicación con tu hijo/a adolescente:

  • Comparte tiempo con él/ella. Te necesita, aunque no quiera reconocerlo, lo más importante para ellos es saber que estás ahí de forma incondicional.
  • No fuerces a tu hijo/a a hablar, aprovecha cuando esté receptivo e inicien ellos las conversaciones.
  • Los tiempos de conversación no son para reprochar ni corregir, se trata de conoceros entre vosotros, dialogar y opinar.
  • No seas intrusivo, respeta su privacidad, es necesario para su desarrollo.
  • Elógiale. Siempre hay algún motivo por el que reforzar a nuestros hijos/as y hacerles sentir bien, especial… animarlos a continuar realizando aquellas conductas que consideramos positivas

Y, sobre todo, recordad estáis creando recuerdos imborrables para el futuro. Lo que hagáis hoy, ellos lo repetirán mañana.

Para más información o ayuda puedes ponerte en contacto con nuestro equipo especializado, te ayudaremos a tener herramientas que ayuden a afrontar este periodo, consiguiendo que durante la adolescencia, la relación entre padre/hijo no se convierta en una batalla continua.

Aprende a dialogar con tu hijo adolescente

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *